Esta obra constituye la puesta al dia de un primer trabajo, dedicado al estudio de las cuencas neogenas del Levante espanol (extremidad oriental de las Cordilleras Beticas), y que fue el tema de una tesis de Estado, defendida en la Universidad de Orsay Paris-sud en 1973. Desde aquella fecha, la activa prosecusion de las investigaciones en colaboracion con diferentes espacialistas hizo aparecer nuevos resultados, que resumimos a continuacion. Este informe consta de cuatro partes : I - Estudio estratigrafico regional Los terrenos del Mioceno inferior y medio muchas veces muy dislocados, presentan discontinuos afloramientos de poca extension. Al reves, los sedimentos escalonados del Mioceno superior al Plio-Cuaternario aparecen ampliamente desarrollados. La mayor parte de los niveles han sido fechados por asociaciones micropaleontologicas caracteristicas : Langhiense (biozonas a G. bisphaericus ; Praeorbulina ; Orbulina) ; Serravalliense (biozonas a G. mayeri ; G. praemenardii ; G. menardii) ; Tortoniense (Tortoniense I a G. acostaensis ; Tortoniense II a G. pseudomiocenica) ; Mioceno terminal cuya base aun pertenece al Tortoniense (biozona a G. humerosa - G. dutertrei) mientras que la mayor parte representa ya el Mesiniense (biozona a G. mediterranea - G. conomiozea) ; Plioceno I (G. margaritae ; G. puncticulata y G. crassaformis biozonas ; Plioceno II (Plioceno medio-superior) desprovisto de especies caracteristicas. Un conjunto continental Plio (?)-Cuaternario se caracteriza por una malacofauna de Gasteropodos continentales. Las formaciones de misma edad, presentan en el interior de la region estudiada, caracteres especificos en cada una de las grandes zonas estructurales de las Cordilleras Beticas. De ahi esta descripcion : 1. Una sucesion neogena en la zona betica interna (Murcia) ; 2. Una sucesion neogena en las zonas externas (Alicante-Elche) ; 3. Una entidad paleogeografica especial, desarrollada en el limite de las zonas externa e interna, y que constituye la extensa cuenca de Alhama-Fortuna. Por otra parte, se debe prestar una atencion esmerada a las llanuras litorales que se extienden ampliamente entre Alicante y Cartagena. Los dates de la geofisica y de los sondeos palian la ausencia casi total de afloramiento y permiten la reconstitucion de una disposicion paleogeografica compuesta en el Mioceno superior por une sucesion de surcos subsidentes y de altos fondos moviles escalonados entre la llanura de Elche y el Campo de Cartagena. Por fin, una sintesis de observaciones hechas sobre el Cuaternario del litoral pone de relieve lo siguiente : 1. Existencia posible de un litoral calabriense jalonado por unas formaciones dunarias y lagunarias. 2. Presencia de dos niveles marinos escalonados, pudiendose atribuir el primero al Paleotirreniense, el segundo al Eutirreniense en Strombus. 3. Los sedimentos cuaternarios continentales constan de dos episodios notables de carapazones calcareas, la primera coronado el Pleistoceno antiguo, la segunda cercando el ciclo paleotirreniense. II - Sintesis estratigrafica 1. Inventario biostratigrafico de los diferentes grupos paleomastologicos recogidos ; 2. Correlaciones estratigraficas generales de las diferentes formaciones neogenas del Levante (vease el cuadro, fig. 49) III - Evolucion orogenica reciente del levante espanol Consta de varios episodios : 1. Tal vez unas presiones importantes se hayan producido aqui como en otras partes de las Cordilleras a finales del Burdigaliense. Estos movimientos trajeron como consecuencia un desmantelamiento casi total de las capas del Aqitaniense y del Burdigaliense. 2. El Langhiense y el Serravalliense corresponden a un periodo de distencion marcado en regiones cercanas por emisiones volcanicas importantes. Las discordancias que jalonan la sedimentacion durante este periodo, corresponden a torcimientos que van acompanando el procese distensivo. 3. Movimientos en compresion se han producido en el limite Serravalliense-Tortoniense. Estan bien caracterizados en cada una de las zonas estructurales del edificio betico y traducen un notable acortamiento N-S del conjunto de la sierra. 4. Un largo periodo de distencion se extiende del Tortoniense al Cuaternario antiguo. Las discordancias registradas, de amplitud reducida pero de gran extension geografica dan prueba de la existencia de movimientos en distension (movimientos intra-Tortoniense ; en el limite Mio-Plioceno ; intra-Plioceno) que se han repercutido sobre la evolucion paleogeografica. 5. Se producen movimientos de compresion durante el Cuaternario. Ellos se traducen por una reactivacion de los accidentes preexistentes (desgarramientos conjugados NE-SW siniestra, NW-SE diestra) y por la creacion de nuevas estructuras (pliegues de eje generalmente E-W). El conjunto de estas deformaciones indica una direccion de acortamiento cercana a N-S. 6. Algunos accidentes marcados por la compresion cuaternaria son el nucleo de una actividad sismica que demuestra su funcionamiento permanente. IV - Intento de sintesis paleogeografica 1. Se tratan distintos aspectos de la sedimentacion neogena y cuaternaria : - Dinamica sedimentaria durante el Neogeno reciente (del Tortoniense al Plioceno) en las cuencas de la zona interna ; evolucion de las aportaciones detriticas turbiditas, colocacion de olistolidos, fallas activas, etc. ; - Modalidades de la sedimentacion diatomitica mesiniense ; - Sedimentacion carbonatada y evaporitica en el Mioceno superior : . el medio arrecifal y su entorno, en el Tortoniense II y en el Mesiniense ; . facies y localizacion de evaporitas (Yeso y anhydrita) en el Tortoniense II y en el Mesiniense. . relaciones laterales de las evaporitas y de otros tipos deposiciones en la cuenca de San Miguel. Presentacion de un modelo de deposicion submarina de dichas evaporitas (fig. 64) : - Dinamica de la genesis de las costras calcareas pleistocenas ; puesta en evidencia de la importancia de los fenomenos bio-pedologicas en su elaboracion. - Evolucion de la sedimentacion arcillosa en relacion con la dinamica de las cuencas de la zona interna. 2. Esbozo paleogeografico. En este capitulo, tratamos de destacar la sintesis de los hechos expuestos arriba. Los datos paleogeograficos referentes al periodo del Mioceno inferior y medio son aun demasiado fragmentarios. En cambio, es posible seguir mas detalladamente la evolucion del cuadro paleogeografico a lo largo del Neogeno reciente. Hemos puesto especialmente de relieve las diferentes fases de evolucion en la historia de las cuencas de la zona interna : fase juvenil de fracturacion, con movimientos verticales de gran amplitud y formacion de surcos subsidentes estrechos, fase madura de extension del sector maritimo y desaparicion de los relieves ; fase de envejecimiento con la contraccion progresiva de las areas subsidentes. La crisis de salinidad mesiniense interviene durante esta ultima fase. A todo lo largo de esta historia, los fenomenos tectonicos ejercen un control permanente sobre la paleogeografia, por su influencia sobre la dinamica sedimentaria y la morfologia de la estructura de las cuencas.
Other| January 01, 1978 Flyschs et ophiolites dans la region de Panjaw; une suture neocimmerienne en Afghanistan central J. Blaise; J. Blaise Author Search for other works by this author on: GSW Google Scholar P. Bordet; P. Bordet Author Search for other works by this author on: GSW Google Scholar J. P. Carbonnel; J. P. Carbonnel Author Search for other works by this author on: GSW Google Scholar C. Montenat C. Montenat Author Search for other works by this author on: GSW Google Scholar Bulletin de la Société Géologique de France (1978) S7-XX (5): 795–798. https://doi.org/10.2113/gssgfbull.S7-XX.5.795 Article history first online: 03 Mar 2017 Cite View This Citation Add to Citation Manager Share Icon Share Twitter LinkedIn Tools Icon Tools Get Permissions Search Site Citation J. Blaise, P. Bordet, J. P. Carbonnel, C. Montenat; Flyschs et ophiolites dans la region de Panjaw; une suture neocimmerienne en Afghanistan central. Bulletin de la Société Géologique de France 1978;; S7-XX (5): 795–798. doi: https://doi.org/10.2113/gssgfbull.S7-XX.5.795 Download citation file: Ris (Zotero) Refmanager EasyBib Bookends Mendeley Papers EndNote RefWorks BibTex toolbar search Search Dropdown Menu nav search search input Search input auto suggest search filter All ContentBy SocietyBulletin de la Société Géologique de France Search Advanced Search This content is PDF only. Please click on the PDF icon to access. First Page Preview Close Modal You do not have access to this content, please speak to your institutional administrator if you feel you should have access.
The Gulf of Suez and the northern Red Sea rifts are the result of intracontinental deformation during Neogene times. The initiation and the development of the rift are controlled by (i) four main trends of faults: N140°-N150°; NS to N 20°; sub E -W ; and N40°-60°; (ii) a zigzag faulting pattern; (iii) two main tectonic events. The first is characterized by strike-slip displacements inducing the formation of antithetic tilted blocks. The geometry of the blocks changes according to their orientation. Complex structures can result from the com bination of several trends. Vertical movements are weak. The second is characterized by synthetic normal movements forming a horst and graben pattern. Vertical displacements are important and induce the generation of the axial trough and uplift of the shoulders of the rift. The zigzag pattern of the faults that govern the Rift and the initial strike-slip displacements cannot result from a simple extensional model but imply a reactivation of inherited discontinuities in the Miocene stress system induced by the northern convergent boundaries of the African and Arabic plates. The major trends of faults that control the Neogene structure have been active in this area since Palaeozoic or even Proterozoic times.
During late Oligocene-early Miocene time, the Suez rift was initiated by northeast-southwest compressional stress. This stress correlated with the compressional events recorded in the southern Syrian arc. It resulted in the initial cracking of the rift zone due to the reactivation of inherited faults with sinistral (Aqaba trend = north-south) and dextral (Duwi = Azimuth 110/degree/) strike-slip movements. These faults bound large parallel-sided panels. Within these panels, blocks tilting along clysmic directions are the result of a unimodal pull-apart effect. During this early stage, between 20 and 25 Ma, basaltic effusions occurred. Around 19 to 20 Ma, the end of block rotation indicates the major phase of crustal extension also ceased. Movements were replaced by large vertical displacements (horsts and grabens, shoulder uplift, deepening of the central trough). The width of this zone suggests the progressive advent of phenomena due to the convection of mantellic material. From 6 to 16 Ma, fault movements had minor amplitudes, subordinate to the general basinward flexure of the margins. The same evolution is recorded in the Gulf of Suez and in the northern Red Sea. Later on, the Aqaba fault acted as a transfer fault between the Gulf of Suez, which remains an intracontinentalmore » rift, and the Red Sea basin, which evolves toward oceanic accretion.« less
Since the 19th century, thousands of footprints were observed in the geological series of the French Mesozoic. All are located in the Triassic and Jurassic. After a promising beginning, in France, it is only a few papers which will be published in the first half 20th century, unlike the USA and of others countries of Western Europe. One ought to wait about 1950 for a revival and now they are nearly 200 papers which were devoted to the ichnofossils. The literature abundance and the renewed interest of the naturalists for the palichnologic studies decided to us to write a synthesis work. This one begins with a stratigraphic inventory in which, localisation, age and paleontological contents of about 180 fossiliferous sites are specified. After having pointed out the followed methods, the footprints paleontological interpretation is then approached in detail and the results obtained are replaced in stratigraphy to deduce the fauna evolution during the Mesozoic. So, it appears that Ichnologic data, more varied and rich in the Triassic and Liassic that those relating to the bones, very rare for the considered periods, are very informative. The middle Triassic (Anisian-Ladinian), thus reveals Cotylosauria, Lepidosauria, Crurotarsi with Rauisuchia, Ornithosuchidae, Crocodylia and Dinosauromorpha more the Prodinosauria: Dinosauriforme whose skeletons are known in Argentina but only in Ladinian. The rather fast domination of Dinosaurs during Norian is also as well shown. The almost exclusive presence of their footprints, up to fifty cm long, in the Lower Hettangian indicates their supremacy in the environments. Footprints characterise not very deep life places located between inter-supratidal limits and often out of water. Sedimentologic and Palaeontologic studies showed that they were great spaces during Middle Triassic, flood-plain with sebkhas while Upper Triassic, and a large coastal marsh in during Liassic in which, mainly, fine stromatolithic layers were deposited. During the same period, bay beaches spread in Vendee. During the Middle Jurassic, they are also brackish to lacustrine environments and recifal lagoons in the Upper Jurassic. Numerous measurements of the footprints and trackways directions showed that the animals moved there in well defined directions, for long periods. They seem due to the palaeotopography of the life environments relatively stable. Also, the discovery of vegetal radicular networks and small footprints far away from the continental borderlands has suggested that the animals continuously lived in these palaeoenvironnements, belonging to large ecosystems, where the sedimentation rate was weak. This explains that the bodies could not fossilize there but only their footprints through the cyanobacterian action in main cases. From the vertical distribution of different ichnospecies, defined with adapted statistical methods, explained in this work, a palichnostratigraphy was established for the Middle Triassic. Although the footprints are also abundant in Hettango-Sinemurian of Grands-Causses and the Vendee, it was not possible, up to now, to establish any zonation in this series; Probably because the palichnofauna is too little diversified there, currently reduced to a majority of Theropods II-IV tridactyl traces.
